Hace ya bastantes meses que el canal Cuatro ha decidido volver a emitir durante los fines de semana, y este verano todos los días, “Pressing Catch“. Este programa que en los años noventa nos entretuvo a algunos en Tele 5 sigue siendo lo mismo, lucha libre simulada mezclada con historias humorísticas dirigidas a un público infantil y a otro no tan infantil que a pesar de saber que está todo dirigido por un guión, nos llaman la atención sus espectaculares movimientos y personajes.
El caso es que no todo es éxito y cariño de los seguidores para los luchadores. El abuso de esteroides y el no saber llevar la fama ha llevado hasta la muerte a varias decenas de luchadores y ex-luchadores.
El caso más cercano es el del suicidio del canadiense Chris Benoit el pasado 24 de junio. Anteriormente, las investigaciones apuntan a que había asesinado a su esposa y a su hijo de siete años por estrangulamiento o envenenamiento. Al día siguiente se suicidó ahorcándose en la sala de pesas de su domicilio y los tres cadáveres no fueron encontrados hasta un día más tarde tras la misteriosa aparición en la página de la wikipedia de Benoit de la muerte de esposa e hijo. Todo apunta hacia la “rabia del roid”, abuso de esteroides y complementos para engordar músculos que provocan episodios de ira y arrebatos explosivos, paranoia y depresión.
La lista es de varias decenas, aunque algunos de los más conocidos son los siguientes:
Eddie Guerrero, 38. Fallo cardíaco. Terremoto Earthquake, 42. Cáncer de vejiga
British Bulldog, 39; Montaña Fidji, 40; Raveshing Rick Rude, 41; El Poli Loco, 42; André el Gigante, 46; Hawk de Legion of Doom, 46 y Yokozuna por infarto de corazón.
Mr. Perfect, 44; Bam-Bam Bigelow, 45 y Crash de Demolition por sobredosis de cocaína, benzodiazepina y medicamentos respectivamente. Dino Bravo el guerrero de Quebec por homicidio a los 44.
O Kerry von Erich, Tornado Texas, quien se suicidó a los 33 años al igual que sus hermanos también luchadores Mike de 23 y Chris de 21. El hermano mayor David murió a los 26 de gastroenteritis aguda durante una gira de la WWF por Japón.
Mención merece el caso de Owen Hart, miembro de la “Fundación Amor”, muerto tras un accidente durante una gala mientras luchaba bajo el nombre de Blue Blazer. Este quizás ha sido el único accidente mortal en un ring. Durante la presentación debía descolgarse desde una altura de quince metros hacia el recinto simulando un vuelo. El cable de acero se partió cayendo sobre las cuerdas y refuerzos metálicos, lo que le produjo la muerte. La tragedia no fue televisada en directo justo porque en ese momento estaban con la promoción de otro combate de la gala.
Aunque en menos de veinte años han muerto más de sesenta luchadores menores de 45 años, parece que la WWE y sus mismos luchadores no hacen caso de las estadísticas, escudándose en unos supuestos controles antidrogas y antidopaje a los que someten a todos los miembros. Parece que entonces la lista seguirá engordando en los próximos meses y mientras seguiremos disfrutando de un buen rato de entretenimiento los fines de semana, sin ver más allá de los personajes televisivos y no así las personas.
Sacado de http://www.neofilia.com/aquihueleamuerto/?p=79